lunes, 23 de abril de 2018

Agu4



Registros anteriores que se perdieron.
Ahora
Que siento las riendas
En mis manos
Me manejo.
Mejor.
Debo fragmentar
El sentimiento
Debo dejar de incubar deseo.
Lo real es subjetivo
Me pareces hermosa
Eso se filtra de mis ojos
A
Mi cerebro.
Pero pienso
que
no hay otro ser de
igual intensidad a la mia.
Ni vos tampoco lo serás.
No hay.
No perdura.
Es una actividad,
del tiempo,
de habitar,
que no prospera.
Todos prefieren las suyas propias.
Más bajas por cierto.
O mas superfluas.
Me importan...
Porque creen la suya mejor.
Que la mía.
Prefieren irse
porque creen que la mía está mal.
Me da bronca a veces,
que me coloquen en ese lugar.
¿Será que me amo tanto realmente?
O será que lxs otrxs no se quieren.
Ni si quiera un poco.
Intento construir.
Ya no vínculos binarios
De cero no, al menos
sino, como sea que se dé.
En la ducha pensaba.
Quizás todo vaya como más lento, por ende un poco más afin.
Al fin.
Ojalá que sea cierto decir 'al fin'.
Sus cercanía lo fue.
Fue
un grito corporal de decir y de alivio
decir
«al fin»
No sé si es susto
No sé si es rareza
No sé si es como una especie de enojo
No sé si es mmmmmmmmm
como un gusto amargo
O algo que no me gustó del todo
(Debo atender a esto, son alertas autoimpuestas. Después termino entendiendo por qué percibí algo turbio. ¿Cancelo algo con este pseudovaticinio?)
En fin.
No sé si algo me gustó del todo.
O sí me gustó, pero no estoy acostumbrade.
Extendió sus brazos por arriba mío.
Y me abrazó.
La verdad que me puse un poco nerviosa.

Es extensa.
Y se ríe con los ojos chinitos tan tiernos
que me desconcentra de lo que escribo, recordarla.
Me desacostumbré un poco a sentir
La sensación de protección.
Suelo andar en
bici
caminando
con las gentes
relacionando
me impulso
hacia cualquiera
sin
protegerme
me mando a la pileta
me tiro siempre
Como soy de tierra
y me seco tanto, hasta quebrar...
mientras que el agua me limpia,
el agua me ayuda a automoldear
mi arcillosa alma.
Con la mano la amaso.
Con la mano la tiro, la golpeo.
Plástica pura
Elástica y adaptable
En otro orden físico mi alma
puede ser un receptor de afección
Mi alma
Tranquilamente
Puede ser un buen emulador del
Espejo vivo, cuerpx, no reflejadx.
Puede bien sintonizarse
Con su más próximo otrx cercanx ser.
Aprenderlo es fácil,
Cuando sabes que sos arcilla,
Tomando formas todo el tiempo
Tomando formas nuevas.
No estancarte, el clima es hostil,
La sequía me convierte en una estatua de barro,
mi color de tierra se hace pálido.
Pues pierde su agua, su fluir, su sangre hidratante.
Es necesario, no estancarse.
No olvidarse del agua vital
Que renueva.
Quizás para eso nos encontramos.
Cuantas charlas fuero? Una... en una una en dos... ojala miles... miles?
Es poco no?
No sé.
Yo anoto no más, no quiero decir más nada.
En la ducha se me iluminó que proyectar en alguien es inevitable. Pero es super vanal. Vacío... lo hacemos con todxs, en todxs proyectamos.
Entonces, invertiré la situación.
Abrazo lo real.
Aunque sí confieso que quiero ir directo a tu cara a besarte. Pero capaz no llegue a hacerlo.
No puedo pensarnos. Me cuesta pensarnos.
Me cuesta verte besándome. Me cuesta visualizar el encuentro.
siento forzar mi cúmulo de cálculos.

De todos modos el vapor de fuerza de este impulso esta algo nublado... poco consistente.
Explota como minis chasquibunes humedos, sin fuerza, contra el piso.
Pero sí debo recordar , porque para mí el origen de las cosas es ultra importante...
La primera vez que te ví
Me fulminaste.
Capricho mio?
Casualidad?
Causalidad?
El porque del por qué.
No sé.
Creo entender mejor de
tiempos diversos
Creo entender mejor de
libertades
Creo entender mejor de
mis anhelos ansiosos
manijas
antecediendo todo
para nada
antecediendo todo
dejando que el ser físico
Concreto, real, valorado y respirante
se diluya en virtualidades
Que se pierden
Se olvidan
Se exponen
Se consumen
Y mueren
Mueren en lo mas frágil de esta tecnología.
Que el planeta está tan mal que
Se va a apagar la luz y nuestras vidas
Mediatizadas
Idiotizadas
Exorcizadas
Por estos dispositivos
Morirán.
¿Y cómo haremos para recuperarnos de ese apocalipsis psicótico autoimpuesto?
No sé, muy extremo todo.
Me voy a quedar
por ahora
en mi hermoso lugar
de contemplarte
gigantona
espontánea
intensa.
No voy a actuar nada.
Jugaré mi fuego seguro sin ego
Sin hacer que el corazón se quede
ciego
Sin dejar que la oración más mentida
Responda al apego
Priorizar la libertad antimambo
Entender la sincronía como un obsequio sideral
Entender que separarnos tampoco es fatal
Entender que aguantarnos desgasta la energía
Cuidar el templo de la oscura sombra del día
Lo cíclico
Lo biónico
Lo botánico
Dinámico
No dicotómico
Está bien entrar en duda
Que la crítica salga
aunque esté un poco cruda
Que se nutra si no sabe,
Que recuerde siempre
Su origen. Me late que:
Ella SaBe
SABE.

sábado, 14 de abril de 2018

Des—aparec3r

Yo creo que...
Por momentos puedo hacer que no me importes nada.
Ignoro todo.
Lo que me hace acordar a vos.
Ignoro todo lo que me recuerda que alguna, miserable
Vez
Estuviste acá...
Presente
Cerca
Al otro lado de mi
Espalda
Que alguna miserable vez
Estuviste
Quériedome (tal como me costaba entender)
Apareciéndote
De la nada a decirme
«te puedo dar un beso?»
Y yo
No entendiendo nada
Como nunca.
Como ahora.
Qué arte será ese de desaparecer
Exhaustivamente
Desaparecer
Como si nada hubiera costado
Como quererte
Conocerte
Como aprehenderte
Como involucrarme
Cuidarte
Como si desaparecer no costara nada.
Como si se comprara algo fácil
Y ya está.
Ante todos esos esfuerzos de
Creer en unx otrx
Desaparecer...
Qué arte será? Tendrá nombre?
Puede que tenga el tuyo.
Pero no quiero dramas
Ni tragedias
Ni cosas tóxicas
No... la verdad que no quiero.
Entonces no me posiciono ahí.
Entonces no intensifico todo.
Entonces me calmo y no persigo a nadie.
Entonces me doy mesura y trato de que todo sea como deba ser.
Sin mi intromisión.
Sin que yo interfiera
Sin que yo interceda
Sin que yo insinue
O maneje... o
Interrumpa... ya fuera silencio... distancia... suspenso.
Como deba ser que deba ser.
Sin embargo...
Me rompí de nuevo...
Quebraron mis certidumbres,
Crujieron mis noches con tu cuerpo...
Se rompieron en el recuerdo de sombras.
Todo quedó reducido a una cuestión:
«y me parece que ya fue»
Todo.
(Nuestrascallesrecorridas
Nuestrasnochesdesalidas
Nuestrasparadasyviajesencolectivo
Nuestrascharlasinvertidas
Nuestrasmantitasenlaplaza
Nuestrosplanesdequepodemoshacer
Nuestracitasromanticasespontaneas
NuestrasnochesdeverjuntasportuceluloquepintEnmicama
Nuestrosmomentosinterminablesdegozarnos
Nuestrosdramasquenonosaguantamos)
Lamento aceptar mi odio hacia la frase que pronunciaste.
Te olvidaste de tanto.
Te tuve que recordar porque la gente me habla de vos. Y tengo que decirles que no estás.
Tengo que soltarte aunque me cueste todavía.
Me quedé como aguantando una injusticia.
Todavía me la estoy sacudiendo del cuero .
Qué pajerxs que somxs.
Qué pereza equivocada tenemos para todo.
Pero, ¿De qué me voy a lamentar?
Si ya está.
Si ya te fuiste.
Si ya pronunciaste la frase horrenda.
La verdad que no queria intensificar lo que no quiero soltar en mi... por un lamento inoportuno de quereres. Pero termino aquí.
La verdad que no quería llegar a un drama...
Pero duele.
Todavia, soltarte, me duele.

viernes, 9 de febrero de 2018

Nuevos estados de neurosis

Estoy en un nuevo caudal. Lluvia vertical, transversal, haría bien para detener un poco mi estanque mental, un poco contaminado del cloro que le tiro para que todo quede claro. "Limpio" Obsesivamente claro. "Limpio".
Por lo menos me gusta enterarme y soportar que aún mi alma puede ser frágil. Volver a sentirme por estos vacíos. Que el pensamiento se me desvíe siempre hacia el recuerdo cercano de su perfume, de las estrellas de su mirada, de sus modismos y combinaciones de acciones espontáneas.
Aunque mi cuerpo cambia de posición todo el tiempo, y tengo que recorrer los diferentes habitáculos de la casa, inauguro en el salón de oro de mi mente, un nuevo estado de neurosis. Pongo un proyector en el medio de la sala, hay un montón de humanoidas sentadas mirando. Yo con el pelo largo, yo con el pelo rojo, yo con el pelo enrulado, yo con el pelo lacio, yo con una trenza, yo con toda la humedad de la ciudad un día. ¿Cuántas he sido? Al menos podrá quizás el aspecto externo, aunque de modo deficiente, ayudar a identificarlas. No importa, sigo en mi cabeza organizando la Convención, en el Salón de Oro. Está el proyector, el video para mostrar al auditorium, el mismo auditorio/público presente, y mi fantasma de yo. Veo todo borroso como a veces veo las cosas en lo que sueño. Y empezamos a ver todxs las escenas. El sillón, la cama, la galería, abrirle la puerta, cocinarle, las veredas caminadas, los colectivos, caminatas de desear agarrarle la mano, caminatas capciosas en latas de cervezas, mis ojos fusiles ante cualquier idiotx, tatatatatatatatatatatata (hubiera hecho desaparecer a tantos...), dormirnos, despertarnos, dormirnos, deseamos, dormirnos deseando, desearnos durmiendo, desearnos mientras soñamos cuando dormimos, soñarla tanto antes y dormir tan tranquila al identificar la contemplación cumplida del deseo, dejarle espacio para que pueda dormir bien, yo sé (o creo saber algo correcto) que no puede a veces del todo conciliar el sueño, el dormir, el tranquilar la mente, el calmar esa vorágine que la altera.
Sí... seguimos viendo todxs el video de los recuerdos: los amigos, los bares, las charlas de ella, las charlas mías, las historias pasadas, las discusiones, los lugares en la urbe city, los calores, los fríos, las veces que decidimos sacarle una foto algo, cacería de escenografías random pero naturales in the city, cosas que solo pasaron con ella, multiplicidad de interesantes episodios, volviendo mojadas por completo bajo la lluvia, empoderadas con millones de otras poderosas, espiándola en el medio de ese taller, sí sí, la espiaba, me gustaba verla, simplemente ver su gesto de total atención y escucha a otrxs, me parecía tan hermoso ese poder que tiene de empatizar, de modo tan genuino, tan cierto, tan sensible, cómo hace?
Sigue el video: miles de panchos, y esos días de la ciudad que fueron nuestros, nadie salió a las calles por miedo, las calles por suerte eran nuestras, sus celos tiernos, nunca me lastimaron, me hacían cosquillas, pocas veces alguien sintió celos por mí y no me lastimó. Pocas veces alguien no me lastimó. Las noches, todas las noches, las mañanas, todas las primeras mañanas, acá en mi cama, allá en su cama, se terminaba el mundo, CONOZCO ESA SENSACIÓN, por suerte, la conozco, ella me la hizo conocer: esa sensación de no necesitar más nada que el momento presente, esa sensación de estar inmersx absolutamente en el momento presente, con quién esté, donde sea, todo funciona, todo encastra, todo tiene sentido por sí mismo. Y nada más.
No se acabó el video por completo, pero se interrumpió. La sala brillaba de sonrisas. Repito: Todo lo vi de forma borrosa como se ve en los sueños las cosas. Todo muy general. Lxs sonrientxs aplaudían, fuerte y mas fuerte, hasta ponerse de pie. Terminó la convención. Me levanto de esa silla en ese Salón de Oro, y todo se torna blanco, borroso, como cuando las nubes bajan ahí al lado del Paraná, al amanecer. Viene un señor alto, vestido de azulejos de diferentes colores, todos rotos, aplicados a su cuerpo, se mueve su cuerpo y hacen un ruido como de roces entre vidrios, me molesta  un poco el chirrido, siento frío. Siento molestias en los pies, empiezan a helarme los pies. El señor alto de azulejos abre su mano derecha de par en par, la coloca en mi cabeza, y me obliga a agacharme con el gesto. No me resisto... no quiero más imponer mi ser a nada ni a nadie, odio sentir que me convierto en lo que odio. Y cuando el señor alto de azulejos me lee este anterior pensamiento clava a mis ojos sus ojos muertos plateados.
Abre la boca y balbucea un rezo de mantras complejos. Comienza a decirme que su universo es muy amplio, que no puedo pretender dominar todos los nombres de sus constelaciones. Me reta, alza la voz, me grita, más fuerte, más violento, sus ojos se ponen rojos, es como si no me perdonara lo que le hice. Es como si me dictara que me merezco por completo el no entendimiento de nadie y la alienación de todx. Es como si me escribiera en el cuello un documento que declare, decrete y registre que merezco que me inyecten en la sangre todos los peores pensamientos sobre mí y por qué soy así, y por qué todo se diluye, y por qué no funciona,
y por qué no funciono
y por qué no funciona
y por qué no funciono
y en vorágine, en espiral, en vómito, torrentes, en cúmulos, en choques de nubes hermosamente suaves desatadoras de los peores truenos... todo se consume. Y sí, y sí, en todo eso se supone que tengo que sostener  varias tranquilidades, como si fuera las patas estables y confiables de una mesa. Y no puedo y me voy, y mi cabeza persiste en ramas, mi cabeza existe en los humos de los puchos fumados afuera, allá, por todos lados. O sea es nada, o sea es y no es, o sea toda esa mierda.
Este tipo, el señor alto de azulejos, termina el tormento, y me deja ahí. Me deja acá. Inmóvil, de nuevo con la parálisis de sueño... va hacia el proyector, coloca de nuevo el video. "Play", empieza de nuevo. De repente me ahoga desear tanto saber cómo está, donde está
cómo está?
dónde está?
qué está haciendo?
BASTA, no. Escribo acá y desagoto ese deseo.
Duermo, parálisis del sueño.
Duermo, el sueño me paraliza.
Parada, duermo pero no sueño.
Paralizada, sueño pero no duermo.
Así la llevo de a poco, de a mucho, como se pueda. Sigo pensando en lo que no quiero. Pongo el video: Analizo, analizo, analizo, perdonar. Perdonar. Perdonarme.
Dono el ego, adorno el vacío. Dono el ego, relego el vacío. Dono el ego, participo del vacío.
Mi alma sigue siendo frágil.

AHORA


nos referimos a Cofasso, a este lugar,que a su manera, es donde la inspiración hace fluir caudales de fuego del arte escrito.