sábado, 18 de junio de 2016

Nosce te ipsum

Lo mío. La cama, la ropa. Lo mío. Mi gato. Mi soledad. La ventana sucia, mi ventana sucia. Este dispositivo comunicador, que odio, pero es mío. Mi número de DNI. Mi nombre. Mi signo, fuera chino, fuera zodiacal, fuera el que se me de la gana. Mi edad, mi edad de hace un año atrás, mi edad venidera si es que sobre-vivo. Mi terquedad de oro. Mi ceguera prudente. Mis no responder, porque aún estoy escuchando. Mi Tibi, ya nombrado, ya con nombre, es de mí. Las pocas verdades, estás, pero son mías. El único consejo que le declamo a todos: "Escribí". Mi capacidad de perderme. Mi meta. Mi muerte, mi esperanza, mi trayecto, mi alma. Mi tos. Mi mareo. Mi memoria. Mi desmayo. Mi agua. Mi sed. Mi hambre. Mi desventura profética. Mi incertidumbre como único motor. Mis ojos. Mi cara. Mi cabeza. Mi sueño. Mi dormir detestable. Mi torrente de pensamiento. Mi pensamiento torrentoso. Mi negligencia para todo, por eso me quiero quedar sola. Mi arbitrariedad al elegir. Mi elección. Exijo ahí pues mi respeto. Quiero un respeto. El mio. Una libertad. Una forma de ser liberada, libre, liberal, librada, ¿libro? Mis libros, tesoros de palabras. Están todos plegados, tienen los misterios en el interior ínfimo milimétrico de las hojas plegadas, pegadas, prensadas. Pero todos esos espacios minúsculos e imposiblemente indivisibles: son Míos. Posesiones, poder, un bien, un capital, un objeto, un ente, una vida, un pulmón. Lo mío. Lo que tengo. Cuidado de no sobrepasar lo mio, lo que tengo. Cuidado de asfixiar este conocimiento en el pleno ejercicio, no es bueno corromper la mente de una cabeza que necesita pensar. Ser, ejercitar-se, explotarse, expandirse, así lo dicta el interior de su núcleo duro, puro, autóctono. Mi pureza, la pureza que intento mantener. Mi silencio, sagrado y mío. Si lo pierdo, me pierdo. Mi devoción. La meta es lo trascendente. Me condeno en esto. La META es la razón de este tiempo. Mi condena elegida. Aquí la llevo, en mí. Con lo que me molesta escuchar cosas que no tengo ganas de escuchar
vivir cosas que no tengo ganas de vivir
aguantar cosas que no tengo ganas de aguantar
tener que explicar cosas que no tengo (MÁS) ganas de explicar
Mi explicación. No importa si esto tiene  o no sentido.
Si es válido. Correcto, políticamente correcto... coherente, cierto, bueno, provechoso
Constructivo
Que ayuda, que promueve, que proporciona, que explica, que ilustra, que limpia. Que purifica.
No importa. Todo puede ser. Todo puede no ser.
Tiene forma ahora, de aquí emerge una forma. ¿Un sentimiento? ¿Un pensamiento?
¿Una acción? ¿Una respuesta? ¿Un hacer? ¿Un ser?
¿Qué?
Nosce
nosce te
nosce ipsum te
Ipsum te nosce
Conócete a tí mismo. Ejercer el Ser.

AHORA


nos referimos a Cofasso, a este lugar,que a su manera, es donde la inspiración hace fluir caudales de fuego del arte escrito.